Todo Lo Que Debéis Saber Para Evitar El Jet Lag Durante Un Viaje Largo

Todos hemos pasado por la molesta sensación del cuerpo resistiéndose al nuevo horario de un nuevo destino. Esto puede hacernos sentir cansados y nos resta tiempo y energía para disfrutar de las aventuras y de las cosas nuevas que este destino tiene para ofrecernos. Siempre me preguntaba cómo hacían las azafatas, pilotos y los viajeros realmente frecuentes hasta que di con sus 14 secretos infalibles.

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1. Relajar el horario

Esto es especialmente importante para aquellos que llevan una agenda a tope y demasiado estricta cuando están en casa. Vamos, ha llegado el momento de relajarse, de pasar unos días increíbles y de conocer, para eso no necesitamos ser tan estrictos, muchas veces nos conviene más dejarnos llevar.

En ese caso, es bueno que os vayáis preparando con anterioridad y antes del viaje vayáis preparando relajando vuestro horario, si es posible. Con esto me refiero a que vayáis soltando la presión de vuestro horario porque esto lo que hará es que sea mucho más difícil que vuestro cuerpo se adapte a este cambio de horario que está por venir.

Recordemos que el cuerpo es una máquina y se va acostumbrando a vuestra rutina, es así como no es raro que os despertéis antes de que suene la alarma. Prepararlo para un vuelo de larga distancia ayudaros significativamente a comenzar más frescos las vacaciones, en lugar de fatigados.

2. Dormir bien la noche antes de volar

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Por lo general, solemos dejar las cosas pendientes para última hora o se suelen presentar percances antes del vuelo, así como suele invadirnos la emoción o los nervios, todo esto pueden ocasionar que durmamos unas escasas horas antes de volar y esto es un gran error. Los cambios de última hora en la rutina sólo harán que sea más difícil adaptarse a las nuevas zonas horarias, y dormir bien durante la noche antes de al vuelo os dejará mejor dispuestos para enfrentar el jet lag.

3. Evitar llegar por la noche

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Una cosa muy común es planificar los vuelos para llegar de noche al lugar de destino y poder dormir, algunas veces no se planifica así, sino que nos ha tocado por casualidad. En cualquier caso, este no es precisamente el panorama ideal, aunque a simple vista lo parezca.

Siempre que sea posible y no escape de vuestras manos, lo mejor es optar por un vuelo con el que leguéis a vuestro destino a la luz del día. Por más cansados que estéis, ver la ciudad en movimiento y todo muy clavo desde la ventanilla os aupará a explorar la ciudad y probablemente no os queráis quedar encerrados en un cuarto de hotel. Esta adrenalina y curiosidad del momento hará que sea más fácil mantenerse despiertos, y así estaréis mucho más tentados a salir.

4. Ser conocedor de avión

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Vamos, no hay que estudiar aviación ni tampoco echaros un intensivo con documentales e información en línea sobre aviones, para nada, una información de manejo público y común es el hecho de que los aviones A350 y A380 son dos de los mejores modelos que hay en cuanto a lo relacionado a vencer jet lag.

Podéis hacer la prueba por vosotros mismos y estar muy pendiente de cuál será el avión en su próximo vuelo a larga distancia, de ser posible escoged uno de estos dos tipos de aviones y sentiréis la diferencia.

Y es que los sistemas de humidificación de alta tecnología ayudan a que el aire retenga la humedad y los sistemas de iluminación LED capaces de crear 16.7 millones de tonos de color simulan las fases naturales del día, lo que ayuda a evitar el jet lag. Otra ventaja es un sistema de purificación de aire que renueva el aire cada dos minutos.

5. Dividir el viaje.

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Pocos ven los beneficios que las escalas en los vuelos largos podrían traer, aunque a algunos les parezca fastidioso bajarse del avión por algún tiempo para luego tomar la próxima conexión, la verdad es que tiene ventajas sobre el jet lag además de, claro, ser más económico que los vuelos directos.

Las escalas dentro de los vuelos nos dan la oportunidad de que nuestros cuerpos tenga más tiempo para adaptarse a la nueva rutina. Veréis el tiempo que hace en cada destino y vuestro cuerpo podrá irse acostumbrando a él, veréis a locales o visitantes tomar la comida que corresponde a la zona horaria y será bueno que, si os da hambre, no toméis una comida diferente a esa para que podáis seguiros mimetizando.

Por otro lado, si tenéis una escala de un tiempo considerable, será bueno que os toméis el tiempo de visitar las tiendas del aeropuerto y así vuestro cuerpo estará en movimiento, lo cual es una buena técnica para vencer el jet lag. ¿Veis? Ahora seguro que lo pensaréis dos veces antes de rechazar la oportunidad de tomar un vuelo largo con escalas.

6. Evitar el bar

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Dentro del avión o en alguna escala podemos estar tentados a ir a por un poco de vino, quizá acompañar la comida con un par de cervezas o irnos aclimatando al ambiente festivo de las vacaciones con un buen gintonic.

Lo que no sabemos y tenemos que tener presente en estos casos para evitar el alcohol antes o durante un vuelo es que los efectos del alcohol en la altitud aumentarán el cansancio y causarán deshidratación, lo que hará aún más difícil superar el inevitable jet lag. La sensación que da es un poco como de resaca, incluso si no os excedéis demasiado con las bebidas.

7. Uno NO rotundo para las pastillas para dormir

Puede que lo primero que hayáis empacado en vuestro equipaje de mano haya sido un par de pastillas para dormir, ya sea por recomendación de otros o porque se os ha ocurrido como una excelente opción para el jet lag, aunque lo parezca, la verdad es que confiarnos en ella es una mala, por no decir terrible, idea.

Y es que la verdad es que no hacen nada para ayudarlos a recuperaros del jet lag, al contrario, crearán una sensación en vuestro cuerpo de cansancio, fatiga y confusión al aterrizar.

Claro que es muy fácil tomarlo como una opción rápida para poder dormir y relajarse en el vuelo, pero esto no significa que sea lo mejor o que cause los efectos deseados, en su lugar vamos a por lo natural. Vuestro cuerpo agradecerá más que llevéis vuestra propia bolsita de té, el de vuestra preferencia, que os guste para relajaros, y pedir un poco de agua caliente que, además, es gratuita e ilimitada en los vuelos. Esto no sólo os ayudará a pegar un ojo durante el vuelo, sino que sentiréis el cuerpo más relajado.

8. Adiós al café

café-con-aviónAunque parezca que la cafeína nos mantendrá activos y con la energía a tope, esto no es tan así en un vuelo de larga distancia. De hecho, lo recomendable es pasar hasta 12 horas antes de vuelo manteniendo a raya las bebidas que contienen cafeína, como el café, las bebidas de cola y las bebidas energéticas. Estos estimulantes artificiales afectarán su capacidad para recuperaros, por el contrario, pueden intensificar el jet lag.

En su lugar, lo recomendable es mantenerse 100% hidratados, con mucha agua antes y durante el vuelo. Como es muy fácil olvidar tomar agua cuando estamos tan preocupados o emocionados por el viaje, es altamente recomendable que llevéis una botella de agua en vuestro equipaje de mano para que podáis tomar un sorbo de agua mientras estáis en el aeropuerto esperando vuestro vuelo. También podéis llenar la botella de agua en el avión para que podáis manteneros hidratados mientras estáis en el aire. No os preocupéis que la azafata seguramente os hará el favor de llenar vuestra botella.

9. Configurar vuestro reloj

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No sólo vuestra mentalidad, sino que hasta vuestro reloj deben estar ya enfocados en el nuevo destino. Una vez que estéis en el avión y os pongáis cómodos, ha llegado el momento de configurar vuestro reloj con la zona horaria de vuestro destino, esto parece un acto pequeño, pero tiene un peso importante en nuestra mentalidad, os permitirá alinearos psicológicamente. Pero nunca, nunca, nunca, hagáis esto ante se abordar el avión, os puede traer más de un conflicto, como llegar tarde al vuelo, por ejemplo.

10. Seguir en movimiento

La buena circulación es clave para vencer el efecto del jet lag, ya os decía por adelantado que las escalas son buenas porque nos permiten manteneros activos y en movimiento antes de abordar otro vuelo, mientras que un vuelo directo no nos deja demasiadas posibilidades.

Sin embargo, dentro del vuelo, los recorridos desde vuestro asiento al baño y un par de ejercicios pequeños de estiramiento de vuestros músculos que podéis hacer desde vuestro asiento será ideales para estimular la circulación. No os sintáis cohibidos, sólo son un par de ejercicios de estiramiento de yoga que, si necesitáis hacerlos de pie, hacerlos en el baño puede veniros bien.

¿Otro consejo importante para mejorar la circulación? Pues, considerad comprar medias de compresión porque funcionan muy bien para promover la circulación sanguínea, al tiempo que os hará sentir cómodos. Sí, lo sé, muchas veces no es lo que mejor se ve. Pero es un vuelo, es mejor relajarse y priorizar la comodidad.

11. Comer bien

Una parte muy importante del jet lag está relacionada con la batalla de vuestro cuerpo al resistirse a comer lo que corresponde según el nuevo horario, por lo que podrá no tener hambre a la hora del almuerzo de vuestro lugar de destino o le provocará muy poca cosa porque tendrá aun la percepción que es, por el contrario, la hora del desayuno o de la cena. Ir adecuando días antes a vuestro cuerpo a este nuevo horario será ideal y lo ayudará mucho en esta transición.

12. Cazar la luz del sol

La luz del día nos hace sentir mejor, más despiertos y con más energía, así que si llegáis de día, lo mejor será evitar lugares oscuros y cerrados y optar directamente por paseos al aire libre para recibir las vitaminas del sol.

13. Hacer algo de ejercicio

La actividad física aumenta vuestras endorfinas y ayuda a estirar los pliegues que se desarrollan en vuelos de larga distancia. Podéis antes del vuelo hacer algo de ejercicio en casa o correr al aire libre, durante el vuelo hay pequeños estiramientos que podéis hacer, mientras que al llegar optar por actividades movidas como caminatas largas o explorar una montaña os vendrá de maravilla para que el cuerpo se recupere de forma natural.

14. Ponerse al día con el sueño

Si llegáis de noche, por más que tengáis algo de energía, es mejor que os acopléis al horario del lugar e intentéis dormir tanto como lo hacéis regularmente, quiero decir, al menos unas ocho horas por la noche. Una manera de estimular el sueño es cenar carbohidratos.

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